ANSORENA SUBASTA 433 18, 19 Y 20 DE DICIEMBRE

PINTURA 125 S ubasta 433 plificada por las obras de Juan de Zurbarán, realizando un tipo de naturalezas muertas elegantes, austeras y expresivas. Sus pinturas tenderán hacia paletas cromáticas sobrias y reducidas, figurando en muchas ocasiones algunos elementos propios del arte flamenco como la presencia de mariposas e insectos. La ligereza del toque de su pincel se observa en esta hermosa pareja de bodegones, en los que se aprecia perfectamente el gusto del pintor a la hora de repartir armoniosamente los volúmenes de sus composiciones, predominando un característico ritmo apaisado. En ellos se observa una interesante contraposición volumétrica que es habitual en las obras del pintor, en la que utiliza los espacios libres de los laterales de la mesa para situar una pequeña pareja de jarroncitos de cristal con flores y en el lado opuesto un tallo y una flor blanca caída. Sus arreglos florales son los típicos de su producción, predominando especies botánicas como: rosas, girasoles, iris, tulipanes, clavelones de indias o claveles; una serie de ramos que eran frecuentes en las grandes casas de la época. Camprobín en sus pinturas de flores, lejos de querer representar la mayor variedad de especies botánicas, evita llenar con su presencia el campo pictórico dejando sus floreros rodeados de aire y de espacio. La luz que los ilumina es suave y con unos colores ligeramente apagados que provocan una extraña y serena belleza atemporal y una atmósfera calmada que era muy apreciada por la clientela sevillana del momento. Gracias a composiciones como éstas, llegó a convertirse en el principal pintor de flores y bodegones de la Sevilla del Siglo Oro, monopolizando la demanda de este tipo de obras en la ciudad tras la muerte de Juan de Zurbarán en el año 1649. Medidas: 63 x 93 cm. c/u. Salida: 160.000 €